Paráfrasis a la película Báilame el agua...
Báilame el agua me decías
mientras abrazabas mi espalda
como quien achucha a un salvavidas.
Báilame el agua
y salpícame de risa...
Allí con la ciudad a nuestros pies,
la salida al callejón aún existía
aun quedaban flores y ríos
aun quedaban fuerzas y la música seguía sonando
de nuestro lado:
Ya no persigo sueños rotos,
los he cosido con el hilo de tus ojos,
y te he cantado al son de acordes
aún no inventados.
Ayúdame y te habré ayudado
que hoy he soñado,
en otra vida, en otro mundo...
Pero a tu lado.
Entonces me caí
y corriste a levantarte con tanto ímpetu
que de lo fuerte fuiste tu a quien acabo abordando
la desdicha...
No tuve fuerzas para rescatarte
no supe dibujar lianas, ni pasadizos, ni salidas
no pude agarrar tu brazo que se deslizaba
y me quede hundido
sobreviviendo
mientras la arena te tragaba...
Carambolas. Este mundo loco utiliza la más mínima coartada
para desintegrarnos y descomponernos...
Porque cuando las cartas nos vienen mal dadas
no siempre se cuenta con suficientes recursos
como para remediarlo
Báilame el agua me decías...
y acabaste ahogada para salvarme
en una suerte de macabro intercambio...
Néftalí
No hay comentarios:
Publicar un comentario